Maite Ezcurdia (1966-2018)
María de Ponte*
El 7 de Diciembre pasado nos despertamos con la triste noticia de que Maite Ezcurdia Olavarrieta acababa de fallecer. Las redes sociales amanecieron inundadas de recuerdos, condolencias, y comentarios que iban de la tristeza a la incredulidad. Maite llevaba años enferma de cáncer, todas lo sabíamos, pero, de alguna forma, nadie se podía imaginar su partida.
La última vez que la vi fue el verano pasado. Estaba de viaje por Euskal Herria, visitando los pueblos de sus antepasados y disfrutando del verano. Iba acompañada de su marido y los tres, con otro amigo, cenamos en Getaria, junto al mar. Hablamos de Filosofía, de México, de Nueva Zelanda, de su salud, de comida y bebida, de sus antepasados de Betelu y, sobre todo, de sus muchos proyectos para los meses siguientes. Al volver a México su estado empeoró, y pasó ingresada los siguientes meses, hasta su muerte. Poco antes había recibido indirectamente mensajes en los que prometía volver al trabajo. No era la primera vez que se recuperaba y lo hacía, por lo que el anuncio de que esta vez no iba a cumplir su promesa resultó devastador también por inesperado.
Maite era una mujer inteligente, activa, amable, fuerte y muy trabajadora. Siempre llena de proyectos, siempre dispuesta a discutir de Filosofía y a compartir una velada con amigas, amigos y colegas. Estuvo trabajando hasta el final, sabiendo quizá que el tiempo apuraba.
Maite, nacida en 1966, obtuvo la licenciatura en Filosofía en la Universidad Nacional Autónoma de México y luego realizó estudios de Maestría y Doctorado en el King’s College London, donde obtuvo su título de Doctora en Filosofía en 1994. A partir de su regreso a México, se integró al Instituto de Investigaciones Filosóficas de la UNAM y desde el 2015 se incorporó también a la Junta de Gobierno de la misma institución.
Maite estuvo siempre profundamente comprometida con la Filosofía analítica en México y en todo el mundo de habla hispana. Es difícil calificar la relevancia de su trabajo en la filosofía analítica, y en el surgimiento y evolución de muchos y, sobre todo, de muchas filósofas en México y en toda América Latina. Maite desempeñó, por ejemplo, un rol fundamental en el surgimiento y gestión de la Asociación Latinoamericana de Filosofía Analítica (ALFAn). Fue, además, editora de la revista Crítica desde 2005 hasta 2011.
En lo que respecta a su trabajo de investigación, Maite trabajó y publicó trabajos muy importantes en las áreas de la Filosofía del lenguaje, la Filosofía de la mente, las Ciencias cognitivas y la Epistemología. Concretamente, destacan sus trabajos acerca de las expresiones referenciales, la división entre semántica y pragmática, la naturaleza de la comprensión lingüística, el conocimiento del lenguaje e innatismo, el contextualismo, y las sensaciones y percepción visual.
Maite fue una autora bastante prolífera, sobre todo si tenemos en cuenta que compaginaba su tarea investigadora con sus tareas docentes y organizativas. Sus publicaciones aparecieron en revistas internacionales como Philosophical Issues, European Review of Philosophy, Canadian Journal of Philosophy, Dianoia y Crítica, entre otras. Fue además editora, o co-editora, de más de ocho volúmenes. Con profunda tristeza mezclada con un gran honor he de decir que, hasta donde yo sé, el último artículo que publicó en vida fue “Semantic Complexity”, incluido en el libro Reference and Representation in Thought and Language, publicado por Oxford University Press en 2017, y editado por Kepa Korta y yo misma. En este extenso artículo Maite resume algunas de sus principales ideas acerca de las expresiones referenciales, entre las que incluye a los demostrativos complejos, en contra de la propuesta en sentido contrario de Stephen Neale.
Cuando su enfermedad la llevó de vuelta al hospital, Maite estaba co-organizando el Simposio de Filosofía del Lenguaje y la Mente, como parte del Congreso Iberoamericano de Filosofía que tendrá lugar en México en Junio de este año. Tras su partida, el Simposio se ha convertido en un homenaje a su persona. Allí nos reuniremos filósofas y filósofos para discutir de Filosofía del lenguaje, de Filosofía de la mente y, sobre todo, para recordar a Maite y a su obra.
La última vez que la vi fue el verano pasado. Estaba de viaje por Euskal Herria, visitando los pueblos de sus antepasados y disfrutando del verano. Iba acompañada de su marido y los tres, con otro amigo, cenamos en Getaria, junto al mar. Hablamos de Filosofía, de México, de Nueva Zelanda, de su salud, de comida y bebida, de sus antepasados de Betelu y, sobre todo, de sus muchos proyectos para los meses siguientes. Al volver a México su estado empeoró, y pasó ingresada los siguientes meses, hasta su muerte. Poco antes había recibido indirectamente mensajes en los que prometía volver al trabajo. No era la primera vez que se recuperaba y lo hacía, por lo que el anuncio de que esta vez no iba a cumplir su promesa resultó devastador también por inesperado.
Maite era una mujer inteligente, activa, amable, fuerte y muy trabajadora. Siempre llena de proyectos, siempre dispuesta a discutir de Filosofía y a compartir una velada con amigas, amigos y colegas. Estuvo trabajando hasta el final, sabiendo quizá que el tiempo apuraba.
Maite, nacida en 1966, obtuvo la licenciatura en Filosofía en la Universidad Nacional Autónoma de México y luego realizó estudios de Maestría y Doctorado en el King’s College London, donde obtuvo su título de Doctora en Filosofía en 1994. A partir de su regreso a México, se integró al Instituto de Investigaciones Filosóficas de la UNAM y desde el 2015 se incorporó también a la Junta de Gobierno de la misma institución.
Maite estuvo siempre profundamente comprometida con la Filosofía analítica en México y en todo el mundo de habla hispana. Es difícil calificar la relevancia de su trabajo en la filosofía analítica, y en el surgimiento y evolución de muchos y, sobre todo, de muchas filósofas en México y en toda América Latina. Maite desempeñó, por ejemplo, un rol fundamental en el surgimiento y gestión de la Asociación Latinoamericana de Filosofía Analítica (ALFAn). Fue, además, editora de la revista Crítica desde 2005 hasta 2011.
En lo que respecta a su trabajo de investigación, Maite trabajó y publicó trabajos muy importantes en las áreas de la Filosofía del lenguaje, la Filosofía de la mente, las Ciencias cognitivas y la Epistemología. Concretamente, destacan sus trabajos acerca de las expresiones referenciales, la división entre semántica y pragmática, la naturaleza de la comprensión lingüística, el conocimiento del lenguaje e innatismo, el contextualismo, y las sensaciones y percepción visual.
Maite fue una autora bastante prolífera, sobre todo si tenemos en cuenta que compaginaba su tarea investigadora con sus tareas docentes y organizativas. Sus publicaciones aparecieron en revistas internacionales como Philosophical Issues, European Review of Philosophy, Canadian Journal of Philosophy, Dianoia y Crítica, entre otras. Fue además editora, o co-editora, de más de ocho volúmenes. Con profunda tristeza mezclada con un gran honor he de decir que, hasta donde yo sé, el último artículo que publicó en vida fue “Semantic Complexity”, incluido en el libro Reference and Representation in Thought and Language, publicado por Oxford University Press en 2017, y editado por Kepa Korta y yo misma. En este extenso artículo Maite resume algunas de sus principales ideas acerca de las expresiones referenciales, entre las que incluye a los demostrativos complejos, en contra de la propuesta en sentido contrario de Stephen Neale.
Cuando su enfermedad la llevó de vuelta al hospital, Maite estaba co-organizando el Simposio de Filosofía del Lenguaje y la Mente, como parte del Congreso Iberoamericano de Filosofía que tendrá lugar en México en Junio de este año. Tras su partida, el Simposio se ha convertido en un homenaje a su persona. Allí nos reuniremos filósofas y filósofos para discutir de Filosofía del lenguaje, de Filosofía de la mente y, sobre todo, para recordar a Maite y a su obra.
* María de Ponte es licenciada y doctora en Filosofía por la Universidad de La Laguna. En la actualidad es profesora en la Universidad del País Vasco.
Comentarios
Publicar un comentario